Vivir la verdad: Cómo y donde buscarla? ¿Donde está? Encontrar la verdad, ejemplos, filosofía de la verdad, camino a la verdad, ciencia y verdad.
Vivir la verdad
El Vivir la verdad: Cómo y donde buscarla? ¿Donde está? Encontrar la verdad, ejemplos, filosofía de la verdad, camino a la verdad, ciencia y verdad.
No quiero convencer a nadie de nada. Tratar de convencer a otra persona es indecoroso, es atentar contra su libertad de pensar o creer o de hacer lo que le dé la gana. Yo quiero sólo enseñar, dar a conocer, mostrar, no demostrar. Que cada uno llegue a la verdad por sus propios pasos, y que nadie le llame equivocado o limitado. (¿Quién es quién para decir “esto es así”, si la historia de la humanidad no es más que una historia de contradicciones y de tanteos y de búsquedas?).
Si a alguien he de convencer algún día, ese alguien ha de ser yo mismo. Convencerme de que no vale la pena llorar, ni afligirse, ni pensar en la muerte. “La vejez, la enfermedad y la muerte”, de Buda, no son más que la muerte, y la muerte es inevitable. Tan inevitable como el nacimiento.
Lo bueno es vivir del mejor modo posible. Peleando, lastimando, acariciando, soñando. (¡Pero siempre se vive del mejor modo posible!)
Mientras yo no pueda respirar bajo el agua, o volar (pero de verdad volar, yo solo, con mis brazos), tendrá que gustarme caminar sobre la tierra, y ser hombre, no pez ni ave.
No tengo ningún deseo que me digan que la luna es diferente a mis sueños.
Vivir la verdad: Cómo y donde buscarla? ¿Donde está? Encontrar la verdad, ejemplos, filosofía de la verdad, camino a la verdad, ciencia y verdad.
Concluyendo
La verdad de la vida es muy parecido a lo dicho aquí por el poeta. Cada ser es dueño de sus actos y de su proceder. Y debe obtener sus propias respuestas. El camino del ser es solo de dicho ser. Ninguna generalidad se le aplica. Cada vida y cada camino es único. No tenemos porque explicar a nadie nuestro proceder. Muchos han intentado distraernos de nuestra esencia de vida y desviarnos de nuestro camino. Solo nosotros mismos somos dueños de nuestras vidas y responsables de nuestros actos. Por ello es indispensable la comunión con nuestro ser superior, para poder seguir el verdadero camino. El camino que nuestra sociedad oculta de muchas maneras.
Por ello se busca formar nuestra opinión y nuestro ser según el molde adecuado a sus intereses.
Es necesario, por tanto, buscar tu ser, tu camino y tu verdad por ti mismo y por nadie más. Nuestros compañeros de viaje y situaciones de interacción con ellos suelen ayudarnos a encontrar ese camino. Bienvenido al verdadero camino!!