Bambú multiuso La planta Medicinal Textil Industrial Energía Alimenticia

Bambú multiuso

Bambú multiuso: Uso medicinal. Uso alimenticio e industrial. Uso textil. Uso industrial. Uso energético. En construcción, ornamentación, sustituto de tabaco.

Bambú multiuso
Bambú multiuso

El bambú: La planta!!!

Aquí en Bambú multiuso: Uso medicinal. Uso alimenticio e industrial. Uso textil. Uso industrial. Uso energético. En construcción, ornamentación, sustituto de tabaco.

El cultivo de bambú es una de las principales opciones a la hora de sustituir las plantaciones de tabaco como parte del cumplimiento del Convenio Marco de Control de Tabaco de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Por lo que este martes a la tarde organizaciones civiles llamaron a poner en vigencia. Poco se conoce en nuestro país del bambú, de su cultivo y de lo versátil que es esta gramínea que tiene más de 1.600 especies. Algunas de ellas «nativas de esta región», dijo en diálogo con Télam Andrea Vega. Es investigadora del Conicet y docente de Botánica en la Facultad de Agronomía de la UBA (Fauba). Entre las características más destacadas de esta planta están su rápido crecimiento. Dependiendo de la especie pueden alcanzar hasta los 30 metros. Se pueden aprovechar brotes, hojas, cañas enteras y hasta el «desperdicio» de las mismas.

En esto último enfocó Vega su actual investigación.
«Es un cultivo noble que crece muy rápido pero, a su vez, es muy bueno cultivarlo ya que es una especie fijadora de suelo». Afirmó y explicó que esto significa que es una planta que «reduce o evita la erosión» y que es «fundamental para evitar que el suelo se pierda en caso de lluvias fuertes o inundaciones».

El bambú es una planta que ha desempeñado un papel importante en el desarrollo de determinadas culturas con las que ha convivido mutuamente. Culturas como la asiática han empleado el bambú en áreas tan diversas como la construcción, la alimentación e incluso en la confección de tela y papel.
Vega defendió, además, el «uso integral que tiene el bambú» y remarcó que las hojas «poseen un 22,6% de proteína bruta, lo cual lo asemeja a la alfalfa y pueden usarse para alimentar el ganado». En el Barrio Chino, ubicado en Belgrano, se pueden encontrar a la venta:  frascos de conservas de brotes de bambú, que son en apariencia similares a los palmitos.

Las cañas del bambú se pueden utilizar con fines productivos y su ventaja es que «en pocos años se regeneran, y de forma constante», señaló Vega, y explicó que «los tallos (cañas) del bambú son leñosos y ésto los hacen muy resistentes», tanto que son conocidos como «el acero vegetal».

Según la especialista, en Colombia se utilizan las cañas de bambú «autóctonas de esa región para hacer construcciones antisísmicas ya que toleran muy bien los movimientos». En el resto del mundo se utilizan en la construcción, en la confección de muebles, de cañerías, de pisos y hasta de bicicletas. Si bien «las mejores cañas», es decir las más grandes, anchas y resistentes, tienen múltiples usos: hay «pequeños fragmentos, lo que se considera material de descarte. Con eso logramos el biocarbón de bambú que se emplea con fines de remediación ambiental». En este sentido explicó que estos biocarbones son utilizados principalmente para «sanear el agua contaminada con arsénico». Y remarcó que «en Argentina el arsénico es un contaminante natural que está presente en muchas provincias, está en el suelo en forma natural y esto pasa al agua».

Asimismo, aseguró que, «a veces, este material puede ser producido por el hombre, pero generalmente la contaminación es natural» y remarcó que estos biocarbonos son «altamente efectivos».

La Organización de la Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) declaró al bambú como «la planta del milenio» por todos sus usos y beneficios. Aaseguró que en todo el mundo unas 30 millones de hectáreas están destinadas a su cultivo. Si bien China, acapara la mayor producción de esta planta, es muy alta la demanda. Dado que en Asia el bambú forma parte de la vida cotidiana y se usa en la producción de palillos para: comida, escarbadientes, fósforos, palillos de incienso, cepillos de dientes, esterillas y canastas, entre otros objetos. Las empresas chinas concentran el 90 por ciento del mercado internacional de exportación de pisos de bambú laminado. También, con nuevas tecnologías se logró incluso producir papel, telas y muebles.

Por otra parte dijo que los «brotes jóvenes de algunas especies se pueden emplear en alimentación, son tiernos, no tienen colesterol y son muy ricos en vitaminas, minerales y aminoácidos».
Alimentación.
Medicina.
Construcción.
Textil.
Papel.
Instrumentos musicales.
Biomasa.
Remos.

Debido a la gran diversificación de especies y al amplio espectro de usos que giran en torno al bambú, algunas regiones donde no era común su crecimiento: se encuentran introduciendo el cultivo como una alternativa ante la creciente necesidad del uso de fuentes renovables. Otras regiones del planeta tales como Australia y Estados Unidos, se encuentran realizando grandes extensiones de cultivos de bambú. Algunas marcas como Toyota, Apple y Lexus, utilizan el bambú como sustituto de algunos de los componentes que forman parte de sus productos. Dotándoles de algunas de las cualidades implícitas de esta planta. Algunos fabricantes utilizan esta madera para la fabricación de remos cuando se requiere de un interior hueco.

En la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires, se investiga el uso de bambú autóctono para sanear las aguas contaminadas con arsénico.

Uno de los problemas más importantes para la salud de los argentinos es la presencia de arsénico en el agua. Aunque no existe una estadística completa a nivel país, al menos 14 provincias presentan este contaminante natural en sus aguas, especialmente Santa Fe y Córdoba. El arsénico es responsable de múltiples afecciones, desde problemas en la piel hasta cáncer. Ante esta realidad, un grupo de investigación de la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires está estudiando cómo removerlo a fin de sanear las aguas, casi en su totalidad, usando los descartes de cañas de bambú nativas del nordeste de la Argentina que abandonan los productores de muebles. Con las cañas se fabrica carbón –con un proceso térmico muy sencillo–, que es el que tiene la propiedad de absorber el contaminante.

Entonces, se habla de biocarbón porque es un carbón que se va a usar para remediar o sanear, en este caso, el agua.

Nosotros produjimos cuatro tipos diferentes de biocarbones, entre no activados y bioactivados. La activación es un proceso por el cual el biocarbón aumenta su superficie, lo que lo vuelve más costoso y difícil de obtener. Con el biocarbón que obtuvieron, que viene de las cañas de descarte que el productor no usa, se pueden llegar a remover valores cercanos al 100 % de arsénico en el agua.

Obtención de biocabón

Para caracterizar las propiedades del carbón de este bambú nativo, las investigadoras emplearon cañas de G. chacoensis pertenecientes a tres estadios de maduración de las cañas: joven, madura y senescente, así como el material de descarte, sin valor comercial para el productor. Las cañas de descarte se secan y quiebran tempranamente y deben ser retiradas de las matas para propiciar el crecimiento de nuevas cañas. Los resultados indican que este último es el material que produce el mejor biocarbón para remediar aguas contaminadas con azul de metileno. Alchouron señaló que el biocarbón, obtenido a alta temperatura y en ausencia de oxígeno (pirólisis), no requiere activación posterior gracias a las características propias de la caña como la uniformidad de poros y la alta superficie específica, entre otras.

Su capacidad de secuestro de contaminantes es superior a los valores de los biocarbones activados de uso convencional en la industria y su costo de producción es notablemente menor.

Del mismo modo, los biocarbones de bambú podrían ser ensayados con otros contaminantes. Alchouron afirmó: “Confirmar estas propiedades en nuestra especie nativa le agrega valor al material y plantea buenos horizontes de producción gracias a la utilidad de las distintas partes de la planta”. Jacinta Alchouron, quien estudia los biocarbones de bambú y su uso en la remediación de aguas contaminadas con arsénico:

“Recibimos al referente de un pueblo originario de Formosa, quien quería conocer los posibles usos de G. chacoensis en su región. Creemos que, por sus propiedades, el uso de esta especie puede contribuir al desarrollo local, pero aún falta generar conocimiento”.

Polisacáridos

En el nivel molecular, el trabajo de Virginia Fernández, también investigadora del Centro de Investigaciones en Hidratos de Carbono (CIHIDECAR, Conicet), busca determinar en las paredes de las células de Guadua chacoensis los distintos azúcares que, combinados, forman los polisacáridos. Las diferencias mínimas a este nivel determinan cuestiones muchos más grandes como su posible uso como forrajera. Al mismo tiempo, y a otra escala, Andrea Vega y su equipo profundizan sus estudios sobre las características anatómicas, morfológicas y nutricionales del follaje en especies seleccionadas. “Como mencionaba anteriormente, dado que el bambú puede ser un buen alimento para los animales, queremos proseguir los estudios y realizar ensayos para evaluar la ganancia de peso en animales pequeños. Es nuestro objetivo a futuro”, concluyó la docente.

Bambú multiuso: Uso medicinal. Uso alimenticio e industrial. Uso textil. Uso industrial. Uso energético. En construcción, ornamentación, sustituto de tabaco.

Otros usos medicinales clásicos

El té de bambú tiene un color amarillo verdoso pálido y ayuda a calmar la sed y puede ser bebida por la noche, ya que no contiene cafeína (teína). Una infusión hecha de hojas de bambú tiene un alto contenido de sílice ya que sin duda alguna, complacerá más a las mujeres, por ser muy bueno para la piel y fortalece el tejido conectivo. La infusión de bambú ayuda contra los antojos y el deseo de comer dulces, dado que el té de bambú quita la sed y como no contiene cafeína es ideal para niños como una alternativa de bebida saludable. Tiene, el té de bambú, un ph básico y así no irrita el estómago ni la mucosa oral. Los bebedores de éste té menos propensos a enfermedades cardiovasculares y algunos tipos de cánceres.

Una infusión de bambú después de comer, estimula la digestión y hay una sensación de ligereza agradable. Algo muy importante es que este té sabe bien sin azúcar y por eso es muy adecuado para personas con diabetes. Se usan solo las hojas jóvenes, de cinco semanas.

Tratamiento y preparación.

Se limpian en el mismo día y se alisan con vapor de agua y a continuación, el bambú se seca y se tuesta para preservar su sabor aromático, además es libre de cafeína y se puede beber frío o caliente. El bambú es muy productivo ya que sólo requiere 1,5 gramos (una cucharadita colmada) por taza (180 ml), el agua se hierve y se deja enfriar a unos 90° a 80°, ahora vertemos el agua sobre el té y dejamos reposar durante 5 minutos antes de poder disfrutarlo. Dejar reposar durante un máximo de 12 minutos, las hojas de bambú se pueden reutilizar hasta tres veces en el mismo día. Lo mejor es probar el té primero antes de añadir azúcares, ya que el té sabe muy bien por sí solo.

Beneficios

Los científicos del Instituto de la Universidad farmacológica Deemed en la India, fueron capaces de demostrar que el extracto de Infusión de Hoja de Bambú es un fármaco antiinflamatorio eficaz y un fármaco potencial contra las úlceras gástricas crónicas. En la Universidad Nacional Chonnam en Corea del Sur, también se ejecuta un amplio programa de investigación que emplea el té con los potenciales para la salud del bambú.
A las hojas de bambú se le atribuyen las siguientes propiedades:

Digestivo: El Té de bambú tiene un efecto digestivo con efectos desintoxicantes, antibacteriano y antimicrobiano. baja el colesterol. Mejora tránsito intestinal.
Células: El té de bambú protege las células.
Tejido conectivo: El té de bambú tiene un efecto positivo para la piel y fortalece el tejido conectivo (debido a su alto contenido de sílice)
Grasa Corporal: El té de bambú ayuda a reducir la grasa corporal.
Sustancias medicinales: Las hojas de bambú contienen más de 200 sustancias medicinales, además es rico en minerales y oligoelementos y es igual que el té verde de antioxidante y no contiene teína, por lo tanto es fácil de digerir, incluso para los niños. Los brotes de bambú contienen ácidos fenólicos, los cuales se sabe que tienen propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.
Bajas calorías: Los brotes bambú tienen 27 calorías por cada 100 gramos.
Antiséptico: El jugo de hojas de bambú ayuda a desinfectar heridas y llagas, dado que contiene metanol.
Saciante: su alto contenido en fibra lo convierte en un alimento muy saciante.

Además

El corazón de bambú se compone de niveles moderados de fibra dietética soluble y no soluble (carbohidratos sin almidón NSP). 100 g de brotes frescos proporcionan 2.2 gramos de fibra. La fibra dietética ayuda a controlar las condiciones de estreñimiento, disminuye los niveles de colesterol malo (LDL) al unirse a él en los intestinos. Los estudios sugieren que la dieta alta en fibra puede ayudar a reducir el riesgo de cáncer de colon y recto al proteger los órganos digestivos de los compuestos tóxicos en los alimentos.
Estos corazones de bambú también son ricos en el grupo B de vitaminas como tiamina, riboflavina, niacina, vitamina B-6 (piridoxina) y ácido pantoténico, que son esenciales para las funciones enzimáticas y metabólicas celulares óptimas.

Otra de las propiedades del bambú es alto contenido en minerales, especialmente manganeso y cobre. Por otro lado, tiene pequeñas cantidades de algunos minerales y electrolitos esenciales como calcio, hierro y fósforo. Manganeso utilizado por el cuerpo humano como cofactor de la enzima antioxidante, superóxido dismutasa. Cobre empleado en la producción de glóbulos rojos. El hierro es esencial para la respiración celular y la formación de glóbulos rojos.

En alimentación

Disecadas, enlatados o en forma de brotes frescos, se consumen como condimento o guarnición, sin olvidar su uso para elaborar bebidas fermentadas. También recuerden sus propiedades terapéuticas. Por lo general los brotes de bambú son comestibles, pero los de Phyllostachys pubescens son especialmente apreciados. Dice la tradición que sabe a una mezcla de manzana y alcachofa y tiene las propiedades nutricionales de la cebolla.

Componentes químicos
El bambú contiene:
89% de humedad
5,7% de hidratos de carbono
3,9% de proteína
Calcio
Fósforo
Hierro
Vitamina C y K
Enzimas amilasa, nucleasa, desamidasa y de silicio.
Los extractos de las hojas contienen metanol.

¿Cómo se come el bambú?

Solo los brotes de bambú son comestibles y se pueden conseguir en locales de comida asiática o mercados especializados.
El brote de bambú tiene una cáscara exterior que debe ser eliminada. En el interior se encuentra un núcleo blando que necesita ser hervido durante 20-30 minutos en una olla destapada para que pierda su amargura. Luego se puede incorporar en cualquier tipo de plato.
Los brotes de bambú se pueden freír, hacer en escabeche, o tomar en forma de jugo o sopa.

Bambú multiuso: Alimentación
Bambú multiuso: Alimentación

Fuente

http://sobrelatierra.agro.uba.ar/bambu-un-cultivo-con-usos-multiples-y-sorprendentes/
-Télam
https://www.tetique.com/blog/tes-especiales/infusion-de-hoja-de-bambu/
https://www.sanasana.com/latinohealthmagazine/usos-medicinales-del-bambu-beneficios-y-como-consumirlo/

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